La taxonomía verde es una vía para que las empresas puedan diferenciar qué proyectos afectan negativamente al clima y al medio ambiente. Por ello, desde la Comisión Europea han impulsado una nueva clasificación basada en las recomendaciones de expertos y científicos. Se han incluido de manera transitoria y bajo muy estrictas condiciones las fuentes como el gas natural y la energía nuclear, como puente hacia un futuro en el que predominen las energías renovables.
Además de abordar estas cuestiones, el próximo 10 de abril, la Cámara de Comercio Británica organiza un evento en el que se dará a conocer en qué momento están las empresas españolas y británicas en el reto que están abordando para lograr la descarbonización de sus procesos. Durante la jornada, también tendrá lugar la presentación oficial de la Comisión de Sostenibilidad.
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